lunes, 22 de febrero de 2010

Qué divertido, no???

Cuando te pasa algo malo un día, decís "puta, qué mala suerte...".

Cuando te pasan dos cosas, decís en voz más alta, "bueno che! La reputa madre!!".
Cuando te pasan tres cosas, decís mirando hacia el cielo con ojos desorbitados, "por qué?!?!? Eh?!?!! Por qué?!?!?!".

Cuando te pasan cuatro o más, te reís porque sabés que hay alguien que se está divirtiendo con vos.

El día viernes comencé mi día con un problema de malos entendidos en facebook que culminaron con la feliz e inteligente decisión de dejar de ser amiga en FB de Rober. Ya hacía tiempo se lo había propuesto y esa mañana tomé cartas en el asunto.

A eso de las 15:40hs mi jefe me dijo que me fuera antes así no me agarraba la lluvia. Un placer la verdad. Antes de subir al bondi decidí ir al chino así no tenía que caminar por mi casa, probablemente estaría lloviendo al momento de mi llegada.
Tenía la caja registradora rota, tuve que esperar como 15 minutos paradita a riesgo de que mi leche perdiera la bendita cadena de frío.

No me mojé, por suerte. Le hice pito catalán a dios porque no logró conseguir que me mojara.

Ah, a todo esto, como tenía fiebre, llegué a casa y me tiré a ver tele en la cama. No sin antes acomodar el balde para evitar que se me mojara el living (sí, tengo un agujero en el techo de mi casa y cuando llueve afuera, llueve adentro).
A la hora estaba, con fiebre aún, acomodando junto al balde dos ollas, trapos de piso y toallas. Mi living era ahora un lago.

En una de las veces que voy a la cocina a escurrir el trapo de piso, veo agua en el piso que manaba de abajo lavarropas. En el intento de correr una bolsa de esas fuertes de cartón que contenía lijas, pinceles, pintura, barniz y aguarrás, la muy perra se engancha con no sé qué carajo y se desfonda. Como resultado de esto, se rompe el frasco de mermelada donde guardaba el barniz con color wengue con el que había pintado las mesas y se desparrama todo entre la heladera y el lavarropas.

Terminé en cuatro patas limpiando mi piso color cremita con cif y aguarrás. Luego me limpié yo mis brazos, manos y rodillas con este último producto y culminé mi limpieza en la ducha cagándome de risa.




PD: el mejor momento fue cuando el sábado al despertar descubrimos con Rober una mancha de humedad en el techo de la habitación!!! Qué plato!! Qué plato!!!!

martes, 16 de febrero de 2010

Mirá, mirá!!!!!


Otro lugar donde pueden encontrarme también... bah, también... acá ya ni me encuentran.
Tal vez por allá esté más seguido dándole Rienda Suelta.
Sólo les dejo de regalo esta conversación telefónica de la semana pasada:
Caro en su laburo: Empresa piripipí, buenos días.
Señora aquejada: Ay, mirá, yo tengo un lavarropas para service... lo compré la semana pasada...
Caro: Hola, buen día señora (re rompe soberanamente que no saluden...), acá no hacemos service de lavarropas, se debe haber confundido de número.
Sra: ah, y qué hago con el lavarropas? Ustedes lo vienen a buscar?
Caro: mmm, no. Esta no es la empresa con la cual usted se quiere comunicar. No tenemos nada que ver con lavarropas.
Sra: ah, está bien. Entonces qué hago con el lavarropas? Me das el número del service.
Caro: no sé, señora, el número del service.
Sra: qué vergüenza... qué vergüenza!!! Descarados!!! Compro el lavarropas y no me ayudan!!!!
Conclusión: Vieja loca.

martes, 2 de febrero de 2010

Rienda Suelta


Hace mucho tiempo que no utilizo este espacio para hacer mis propios chivos. Así que vuelvo sobre eso, los chivos, y hago autobombo.



A partir de mañana, 3 de febrero, todos los miércoles de 22 a 24hs podrán escucharme en Rienda Suelta. Se mueren de ganas, no? Ja, sí, me lo imaginé...


Recuerden: Miércoles 22hs, RIENDA SUELTA!!!!

www.agradio.com.ar



MSN: riendasuelta@hotmail.es
Face: Rienda Suelta

jueves, 28 de enero de 2010

No noticia


Tal vez la equivocada sea yo... bah, no, por supuesto que no. Jamás en la vida me equivoqué, ni siquiera me equivoco cuando compro jabón para lavar a mano en vez del que es para lavarropas automático, o cuando tengo 3 frascos de shampoo y ningún acondicionador. Eso es vagancia, por no leer me pasa.

Ni siquiera me equivoqué cuando cuando me enamoré del amigo más impresentable de mi hermano, tan sólo me extralimité con los gustos y las buenas costumbres... me pasé, digamos, del otro lado, del lado oscuro.
Tampoco fue un error el haber estudiado 6 años una carrera para luego, con diploma y foto, darme cuenta de que (vamos Lulet acá con
Chinga tu letra, que vs de que) no me gustaba ejercer. Sólo pospuse mi deseo un tiempito.

Entonces tampoco me equivoco cuando considero una estupidez que el calor en verano sea noticia en todos lados.

Dejate de joder...


Me decís que están haciendo 50º, bueno, ok, eso sí sería una noticia.
Me decís que están haciendo 2º, bueno, ok, eso también sería una noticia.

El resto son giladas.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

La Casa

"2215", así la llamo siempre, fue una de mis moradas. Sólo 12 departamentos distribuidos en dos pisos. Un administrador de consorcio bastante ladrón, pagabamos una fortuna por ser que no teníamos ascensor ni encargado ni nada.
El día que me mudé, siendo ésto los primeros días de enero de 2003 (o 2002, mmm, no recuerdo), me ataja la mujer que iba todos los días a limpiar al edificio, repartir correspondencia, sacar la basura y chusmear absolutamente todo.

Teresa

Si algún día te preguntan cómo te imaginás a una bruja, existen altísimas probabilidades de que la describas a ella.
Pelo muy canoso acorde a su elevada edad, corte carré, vincha con moñito cual quinceañera; nariz larga y finita; ojitos entrecerrados, boca con mueca de constante disgusto. Todo lo necesario para componer una cara de vieja mala.

Estaba subiendo la mesita de luz* cuando como por arte de magia ella hace su aparición en la escalera.

-Ah, vos te estás mudando?
-Sí, qué tal? Soy Carolina.
-Yo soy Teresa

Hace un lento acercamiento a mi persona y en tono de secreto me dice...


-Sabías que en esta casa (refiriéndose al edificio) hay un misterio?

-No

-Sí, mirá yo te cuento... La mujer que vivía acá (mi nuevo hogar) se murió quemada. Y cuando entraron no había nada prendido... Raro... No se sabe qué pasó. Un misterio...

-(Vieja chusma, hija de puta! no me vas a asustar!) Ah, sí.

-Y el hombre de acá al lado se suicidó el año pasado, se pegó un tiro ( o se ahorcó, no lo recuerdo, en ese momento ya me venía venir las necrológicas del barrio y cerré un poco mis oídos).

-Ah...

-Y ahí enfrente (del otro lado del pasillo) vivían dos viejitos...

-Ah

-Les entraron a robar hace poco, los dejaron atados y se murieron, los dos!

-Ah... (la re con*** de mi madre, esto debe estar lleno de fantasmas!).



Así comenzó mi estadía en La Casa.



*Haciendo equilibrio para que no se me abriera la puertita y todo cayera al piso, porque cuando me mudo no vacío las cosas, las mudo con todo adentro. Sí, soy una larva.